Por si no lo sabías, lo que pones en tu plato se refleja en tu espejo. ¿Las claves para verte más guapa? Sigue el consejo de los expertos: evita azúcares y grasas, y elige frutas y verduras.

Los riesgos del azúcar
En el proceso de envejecimiento influyen nuestro material genético, el estilo de vida, los excesos de alcohol, tabaco, estrés y, por supuesto, la alimentación, qiue si es inadecuada puede acelerarlo y provocar que la edad biológica sea superior a la cronológica. A este respecto, el fenómeno de la glicación es clave. Es un proceso lento que provoca envejecimiento celular. Es una reacción química que se produce frente a los excesos de azúcares, en concreto, la glucosa. Como esta se tiene que fijar a sustancias transportadoras para llegar a las células, cuando hay un exceso utiliza otros vehículos que son moléculas proteicas y se crean compuestos imposibles de eliminar. En la piel, este fenómeno ocurre en la dermis, provocando la fijación de la glucosa a las fibras de colágeno. Esto desestructura las células y provoca falta de elasticidad, firmeza y arrugas.
Los mejores aliados
Para llenar la cesta de la compra teniendo en cuenta las necesidades de la piel, hay que buscar vitaminas, minerales y aminoácidos. Entre las primeras se ha de prestar atención a la vitamina C, presente en los cítricos; la vitamina E, en los aceites de sofá y de oliva, a la provitamina A, en zanahorias y calabaza. Los minerales estrella son el selenio (en carnes, pescados, marisco y huevos); el cobre (en pescados, mariscos, cereales y vegetales verdes) y el zinc (en legumbres, carnes y cereales completos). Por último, apuntar que un aminoácido, la cisteína, que encontramos en huevos, lácteos, carnes y pescados, es importante para la producción de las enzimas que combaten los radicales libres. El secreto: comer de todo todos los días.
Artículo de la revista “Mujer hoy” del 5 de noviembre del 2011